Sin Fiscal. Terminó la temporada o mejor el período judicial, y la Corte Suprema se fué a vacaciones sin resolver la interinidad del principal funcionario instructor del país. A pesar de que con la renuncia de la anterior integrante de la terna, y el nombramiento por el Gobierno de la nueva, ya podría darse por resuelto el impasse de la "inviabilidad" de los candidatos.
Y entre otras cosas, la Corte, ya acostumbrándose a su nueva táctica de amenazar con acudir a las Cortes internacionales se encontró con un problema inesperado: la impaciencia de la representante de las Naciones Unidas, a quien los magistrados invitaron a su sede, seguramente con la intención de ganarla para su causa. Pero la señora les salió poco dócil y no se rindió a las maniobras de seducción de la Corporación, porque prácticamente la emplazó a resolver el problema cuanto antes. Señal de que las cosas están empezando a andar en un sentido nada favorable a los togados del Palacio de Justicia.
Los magistrados, conscientes de que los vientos están comenzando a soplar en contra, anunciaron que entrevistarán a los nuevos ternados después de vacaciones. Y es mejor que lo hagan, porque de pronto se ven en dificultades más graves.
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