Cien dias cruciales para China

Hemos entrado en los cien días finales antes de los Juegos Olímpicos de China, los más politizados de la historia, antes de comenzar. En ello hay una cierta ironía de la historia, porque fué precisamente la República Popular quien inauguró los boicots contra las olimpíadas de la era moderna, al aplicar el procedimiento a Melbourne en 1.956, para protestar contra la presencia de Taiwan en las competencias. Las dificultades por las que ha pasado este proyecto, se evidencian en las tribulaciones del viaje de la Llama olímpica por 19 países, en la mayoría de los cuales ha habido desórdenes y protestas de los tibetanos, que aprovecharon hábilmente el compromiso chino para manifestar su descontento por lo que ellos denuncian como la ocupación de su país por el gigante asiático. Todo lo cual ha puesto también en aprietos a los países occidentales, atrapados entre su deseo de aparecer como defensores de los derechos del Tíbet, y los intereses económicos que representa la competencia, pero también el mercado chino. Les ha ayudado Beijin con su declaración de que está dispuesto a conversar con representantes o delegados del Dalai Lama, lo cual le baja el tono a las supuestas protestas occidentales, pero está lejos de arreglar el conflicto definitivamente. En todo caso, estos cien días van a exigir de los chinos mucha de la milenaria habilidad que se les atribuye, para llegar a los Juegos Olímpicos tan exitosamentecomo ellos quieren.