martes, 12 de agosto de 2008

La niña fea de la linda voz

Su voz cautivó al país y su imagen fue el colofón a la puesta en escena de una China que pretende presentarse ante el mundo sin defectos. Los periódicos chinos alabaron su "ascendente carrera musical" y la propaganda habló de ella como "un ángel sonriente" que llevó las lágrimas a los hogares chinos. Sólo que no era ella quien que cantaba. La niña china que supuestamente entonó la "Oda a la Patria" durante la ceremonia de inauguración de los Juegos estaba cantando en 'playback' después de que funcionarios del Partido Comunista consideraron que la verdadera cantante era demasiado fea y gorda para presentar la imagen del país.

Nada es lo que parece detrás del declarado objetivo del Gobierno chino de hacer de Pekín 2008 los 'Juegos sin errores', muestra del nuevo poderío del país en el mundo. Los estadios que no se llenan, y son muchos, son ocupados por voluntarios. Los vecinos de la capital que no están de acuerdo con el evento son silenciados e incluso enviados a la cárcel. Los ciudadanos de Pekín han sido instruidos sobre cómo comportarse, qué responder a las preguntas de los periodistas y de qué hablar con los extranjeros.

El cambio de la cantante, sin embargo, podría ser demasiado incluso para los chinos, que el martes comenzaron a criticar la decisión en foros de Internet describiendo la decisión como 'injusta' y 'humillante' para la niña descartada.

Yang Peiyi, de siete años, había sido elegida para actuar en la ceremonia debido a la calidad de su voz y tras pasar una selección entre miles de candidatas de todo el país. Pero la visualización de un ensayo por altos cargos comunistas obligó a cambiarla por Lin Miaoke, dos años mayor y con una mejor presencia a los ojos del Gobierno. Finalmente fue Lin quien actuó el pasado viernes ante un abarrotado estadio del 'Nido de Pájaro' y una audiencia de cientos de millones de personas de todo el mundo. La noticia del cambio de la niña en el último momento coincide con la admisión por parte de las autoridades de que otros momentos de la ceremonia de inauguración fueron grabados días antes de su emisión, aunque su señal fue ofrecida como si fueran en directo.Los organizadores temían, por ejemplo, que la polución que normalmente envuelve la ciudad no permitiera ver la cadena de 29 explosiones pirotécnicas que recorrió la ciudad y decidieron incluir el montaje tras haber tomado las imágenes en un día claro. 

La actuación de la niña Lin la convirtió en una celebridad nacional sin que nadie informara de que no era la cantante hasta que fue desvelado por la indiscreción de uno de los miembros del equipo que organizó la coreografía musical. 


1 comentario:

Anónimo dijo...

cést a dire que les chinois sont aussi falsifiers dans des shows