Hay una extraña e inquietante convergencia en los comentaristas de prensa respecto de lo que le espera a este país el año entrante. Según algunos, se ha desaprovechado, en el manejo de la economía, la oportunidad de haber trabajado sobre determinados frentes, como el del déficit fiscal. De otro lado, partiendo de la recesión en la economía norteamericana, algo que parece ser inevitable según los llamados expertos, sus efectos habrán de sentirse con particular eco perturbador en el país. Además, si como se viene diciendo, Venezuela privilegia sus relaciones comerciales con Brasil en detrimento de las que, con tan vigoroso impulso ha venido teniendo con nuestra economía, ello habrá de sumarse al ya sombrío cuadro que, según se dice, nos espera. Como hemos tenido un crecimiento tan notable de la economía, algo más del 7%, eso no puede durar para los entendidos, y la desaceleración es inminente.
Sólo nos queda esperar que tan macabros arúspices estén, como tantas otras veces, equivocados.
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