Varias conclusiones se pueden adelantar sobre los resultados del Super Martes electoral en los Estados Unidos:
1.- No aparece claro todavía quien podrá ser el candidato Demócrata a la Presidencia: Ni la Señora Clinton ni el senador Obama tienen una mayoría concluyente que les permita imponerse en la Convención de su partido.
2.- El Señor Mc Cain será probablemente el candidato Republicano.
3.- No parece realista pensar en un "dream ticket" que incluya tanto a Clinton y a Obama como candidatos a la Presidencia o Vicepresidencia en cualquier órden: ambos son candidatos del norte de los EE. UU. y el poder sureño es demasiado determinante en unas elecciones para desafiarlo dejándolo por fuera. Además, cualquier incidente que reviva el temor de los ciudadanos al terrorismo dentro de la nación, puede desplazar el respaldo de la gente hacia el partido Republicano, más radical en esta materia.
4.- El creciente fortalecimiento del señor Mc Cain, amenaza con hacer realidad la pesadilla europea de un nuevo Presidente Republicano. En efecto, tanto Clinton como Obama tienen peligrosos handicaps: los temas de "género" y "raza", que están muy lejos de ser incontrovertibles en buena parte de la sociedad norteamericana. A Mc Cain, por su parte, lo desfavorece su edad (71), pero lo beneficia su condición de héroe y prisionero durante la guerra de Vietnam.
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