Las Iglesias verdaderas

La religión es una cuestión de fé y no de razón. Si alguien tiene fé en su Iglesia, es de suponer que la considere verdadera o confiable o digna de credibilidad o cosa así; por tanto ha de suponer que los otros credos no son susceptibles de tal confianza, fé o credibilidad. De lo contrario pensaría que otra u otras o todas son igualmente válidas, y la cuestión de la religión en particular, carecería de importancia para él; Entonces, ¿ porqué hay tanta alharaca si alguien creyente, ya sea simple practicante o cura o pastor u obispo o patriarca o pontífice o ayatola o clérigo de cualquier especie dice que su confesión es la única digna de crédito ? Nos parece que es porque se considera que una declaración de esta clase es imprudente. Y ello significa que se piensa que lo religioso o las cuestiones de fé deben tratarse como los asuntos políticos o sociales, es decir como materias de conveniencia u oportunidad. Es decir, no como cuestiones de pura fé. Y ello es contradictorio.