miércoles, 1 de agosto de 2007
Efecto TV
Alguien debería estudiar el efecto de la exposición a la televisión sobre las personas. Porque, aparentemente, aparecer frecuentemente en la "caja mágica' perturba gravemente. Y ello parece ocurrirle incluso a los espíritus más ecuánimes y a las mentes más esclarecidas. Es, claro está, un aspecto particular de un fenómeno más general: la alteración de la modestia como resultado de la excesiva atención de la multitud. Pero en el caso de ese aparato hoy omnipresente, las consecuencias son más notorias e impresionantes: un sacerdote pierde la humildad cuando se convence de que puede hacer que un conocido criminal se entregue a las autoridades. Al final ello no ocurre, pero el santo pastor no se libra de dar un triste espectáculo a sus sorprendidos espectadores. Un profesor recorre el país en una impresionante caminata de más de 900 kilómetros, apareciendo diariamente en los noticieros, y termina exigiendo que el Presidente de la República lo visite porque considera que no tiene porqué hacerlo él. Desastres de la fama sobre una vanidad excitada en un hombre bueno y valeroso.
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